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17.2- EL LIDERAZGO COMO RASGO DE LA PERSONALIDAD.



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En Psicología, el término define la aptitud para actuar como símbolo de la clase de acción o de pensamiento, que promete satisfacer las necesidades o deseos del grupo.

En cambio, en Sociología es el arte de encaminar las energías de un grupo hacia una acción o pensamientos satisfactorios.

A lo largo de la Historia ha prevalecido la pregunta: ¿Los líderes nacen o se hacen?, es decir, ¿ser «líder» es algo innato o se aprende? Esta ha sido fuente de discusión y polémica, la cual todavía no ha sido satisfactoriamente resuelta. Para responder a esta pregunta podemos interpretar y analizar el liderazgo desde dos perspectivas:

- Como cualidad personal del líder o rasgo de personalidad.

- Como una función dentro de una organización, comunidad o sociedad.

Si bien en un inicio el liderazgo se definía preferentemente bajo esta primera perspectiva, en la actualidad, gracias a investigaciones en el campo de la teoría de las organizaciones, tiende cada vez más a predominar la concepción del liderazgo como una función dentro de las organizaciones y la sociedad.

En los albores de la Historia el concepto de autoridad estaba rodeado por un aura mágico-religiosa. El líder era concebido como un ser superior al resto de los miembros del grupo, con atributos especiales. Un individuo, al demostrar su superioridad ante la comunidad, se convertía en el líder. Se consideraba que estos poderes o atributos especiales se transmitían biológicamente de padre a hijo o era un don de los dioses, es decir, nacían con ellos.

Sin embargo, aún entonces, se buscó a través de la transmisión de conocimientos y habilidades crear líderes.

Durante mucho tiempo se ha pretendido definir y medir los rasgos y las habilidades de los líderes; sin embargo, no se ha logrado hasta ahora un consenso al respecto. Las listas y las explicaciones son muy diversas, amplias y heterogéneas. Estos listados reflejan, más que las características verdaderas de un líder, los valores prevalentes en la sociedad o la imagen del líder ideal.

Y aunque actualmente ya no se piensa que estas habilidades son supernaturales, sí se acepta que los líderes poseen estas en mayor grado.

De hecho, los principales estudios sobre el liderazgo señalan que los líderes tienden a ser más brillantes, tienen mejor criterio, interactúan más, trabajan bien bajo tensión, toman decisiones, tienden a tomar el mando o el control y se sienten seguros de sí mismos.